Álbum para Diana

Hoy me gustaría compartir un álbum de niña que hice para regalar. La verdad es que siempre me retraso con los regalos, y es algo en lo que he estado trabajando últimamente, dar sentido a lo qué hago, para quién lo hago,… organizarme mejor, no aceptar tantos trabajos y en definitiva… vivir sin tanto estrés. Si es que voy siempre a tope, con la agenda completa,… y a veces, cuando te paras a pensar, te das cuenta que algo estás haciendo mal, terriblemente mal. Todo este año de pandemia, sin talleres, me ha dejado tener el paréntesis que necesitaba. No encontraba modo alguno de parar, la verdad, me metía en mil trabajos, quitando mil horas de sueño, y llegando no se cómo a todo… o llegando malamente. Pero así, no se puede vivir… al final, como dice una amiga, el cuerpo te habla, te va dando avisos, hasta que le hagas o no caso, te obliga a parar. No he tenido ningún susto «gordo», pero sí recuerdo haberlo pasado realmente mal, sobre todo una vez en la que me di cuenta que estaba totalmente agotada y no iba poder más, estaba sin energía, creí que el corazón se me paraba, casi no podía ni respirar… pero aún así, tuve que seguir porque tenía que hacerlo, acabar con mil compromisos… Y por ello pido mil disculpas si fue a ti a quién fallé. Y después, no me apetecía hacer nada,… literalmente nada de nada… y si quería obligarme a algo, me ponía a recortar, troquelar,… y poco a poco he ido recuperando las ganas de crear, por eso, hacer y regalar tarjetas me ha venido realmente bien… y crear… que es lo que realmente me gusta… sin estrés. Y esa paz y tranquilidad la he encontrando haciendo tarjetas, tarjetas porque sí, para alguien concreto, y porque me encanta dar pequeñas y grandes sorpresas.
Y también durante todo este tiempo, he aprendido a decir no, cuando no voy a poder, o simplemente no me apetece. Porque quiero decidir dónde exactamente volcar mi energía… y si he sacado algo en claro de este último año, tan duro para todos, es que tengo que cambiar mis prioridades, me tengo que cuidar y querer más, para así poder dar todo lo que quiero y necesito dar a los que quiero.
Y así fue como fui dejando para el final regalos como éste… pero por fin… le llegó su turno… Os lo enseño hoy, pero ya lo regalé el año pasado. Y también tuve que buscar el tiempo para editar fotos y preparar el vídeo.

La caja está realizada con técnicas de cartonage, es bonito transformar el cartón gris en algo tan bonito y útil para guardar un álbum y otros detalles de un bebé.

El álbum quedó muy gordito… quizás demasiadas páginas, una por mes, con mucha capacidad para fotos. Menos mal que encontré una espiral rosa muy gordita, y con el cierre con lazo lo conseguí finalmente.